En este último período la oleada de homicidios extrajudiciales por grupos de exterminio ha ido en aumento, los cuales están conformados por policías y militares. El homicidio extrajudicial consiste en el homicidio de manera deliberada de una persona por parte de un servidor público que se apoya en la potestad de un Estado para justificar el crimen.[1]
En este último período la oleada de homicidios extrajudiciales por grupos de exterminio ha ido en aumento, los cuales están conformados por policías y militares. El homicidio extrajudicial consiste en el homicidio de manera deliberada de una persona por parte de un servidor público que se apoya en la potestad de un Estado para justificar el crimen.[1]
Desde el año 2014 se inició la captura de policías y militares pertenecientes a grupos que ellos mismos denominaban grupos de autodefensa, por lo tanto, es necesario aclarar y diferenciar qué es un grupo de autodefensa y qué son los grupos de exterminio. Un grupo de autodefensa desde el punto de vista obrero y revolucionario, se conforma democráticamente a partir de una asamblea comunitaria, de trabajadores de fábrica, etc., extendiéndose a nivel local y nacional según el espacio donde se desarrollen, los miembros del comité de autodefensa deberán accionar bajo la supeditación de la mayoría y estar claros del porqué de su accionar, un comité de autodefensa surge debido a la incapacidad de las autoridades de brindar seguridad a la población, no es un ente aislado de las comunidades donde se desarrollan, y pueden estar presente en todas las comunidades, barrios, fabricas, centros de trabajo, de estudio, etc., quienes para asegurar su objetivo deberán estar armados pero no funcionar anárquicamente.
Con los grupos de exterminio es todo lo contrario, la operatividad de estos grupos, no es más que un accionar aislado producto de la desesperación y las condiciones de inseguridad en la que nos encontramos en nuestro país, donde actúan sujetos particulares, funcionarios, policías, soldados, sicarios etc., sin ninguna vinculación con las comunidades u organizaciones de la clase obrera. Como lo muestra este extracto de una nota periodística: “En el último arresto llevado a cabo en junio del presente año, fueron capturados un jefe, un agente y un motorista de la policía, así como 15 soldados y 34 particulares quienes fueron también detenidos y serán formalmente acusados por la Fiscalía General de integrar un grupo de exterminio de pandilleros que operaba en la zona oriental del país y que cometió al menos 36 homicidios”.[2]
Nosotros como marxistas nos oponemos rotundamente a la formación de estos grupos de exterminio ya que con la eliminación física de los pandilleros y delincuentes “comunes” no solventamos las condiciones reales que generan este fenómeno y en las que nos mantiene sumergidos el sistema capitalista, condiciones en las cuales han surgido estos grupos lumpenizados. Es necesaria la organización de los trabajadores, estudiantes, campesinos, para así poder hacer una lucha férrea contra el sistema capitalista y poder hacer cambios de raíz en las condiciones en las que vivimos. No podemos confiar en grupos de exterminio que trabajan de forma aislada y que no obedecen a nadie, como antes lo hemos dicho, al no estar supeditados a la decisión de los trabajadores organizados es muy fácil que estos se degeneren y actúan como un grupo lumpen más. Los elementos de la PNC y el ejército podrían participar en los comités de autodefensa, pero de igual forma deberán estar supeditados a las decisiones de la asamblea comunitaria, para evitar que se consideren superiores dentro del comité y que abusen de la “autoridad” que les ha brindado el Estado burgués. Ya que es muy común el abuso de autoridad por parte de estos elementos, lo vemos en arrestos arbitrarios con el uso de la violencia excesiva en algunos casos, como por ejemplo el último caso muy sonado el cual implica a dos policías que colocaron droga a un joven el 10 de enero del presente.
Son estos abusos de autoridad los que nos hacen recalcar la necesidad de organización del proletariado y la conformación democrática de comités de autodefensa, pero sobre todo la lucha por la abolición del sistema capitalista y el cambio de las condiciones de vida en las que nos encontramos.
¡No a los grupos de exterminio! ¡No al abuso de autoridad!
[1]1 OACDH. 14 de septiembre de 2005. Consideraciones sobre la investigación y el juzgamiento de conductas punibles constitutivas de graves violaciones de los derechos humanos o de crímenes de guerra
[2] División élite captura a militares y policías acusados de integrar un grupo de exterminio. www.elsalvador.com