ACERI es la Asociación Coordinadora de Estudiantes Internacionalistas, y durante años ha realizado trabajo estudiantil en la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales de la Universidad de El Salvador, a su vez cuenta con un trabajo territorial de apoyo a las comunidades en zonas del interior del país, como Morazán y Chalatenango. Campañas de desarrollo local y brigadas médicas componen su agenda de intervención. Hoy se ven amenazados ante el aviso por parte de la Facultad para desalojarles del espacio físico donde operan, veamos por qué.
El 2015 y la disputa política en la UES
El año 2015 en la UES significó un pequeño punto de inflexión en las campañas políticas de la UES, muchas organizaciones y gremios estudiantiles tradicionales dieron la espalda a pasadas administraciones y decidieron apoyar “nuevas fórmulas”, de hecho en este contexto se desarrolló un proceso de lucha en la Facultad de Ciencias y Humanidades, que dio como resultado la creación del Movimiento de Estudiantes de Ciencias y Humanidades (MECH), que pretendía ser una nueva alternativa para la política interna de la UES.
En este contexto, los compañeros de ACERI, junto con AED (Asociación de Estudiantes de Derecho) decidieron apoyar a nuevas alternativas para el gobierno de la Facultad de Jurisprudencia. En correspondencia con el BPJ, los compañeros declaran: “En 2015 se eligieron las autoridades de la facultad, nosotros y la AED no apoyamos la fórmula de la ahora decana Evelyn Farfán, ella es parte de CPU-RN (Concertación para la Participación Universitaria – Resistencia Nacional) además contó con el apoyo del FMLN por medio de la asociación de abogados UNAJUD (Unidad de Abogados por la Justicia y la Democracia) que es mayoría a nivel de sector no docente”.
De esta manera, Farfán logró posicionarse como la decana de la facultad en cuestión, y según los compañeros de ACERI, ha llevado políticas anti-democráticas y en contrade las organizaciones y gremios que no apoyaron su fórmula. Por ejemplo, ACERI denuncia: “en 2017 ella quería contratar a 4 docentes de sus amigos y protegidos, pero UNAJUD que estaba representada como sector no docente en la facultad se opuso a esta contratación y se dio una disputa entre ellos, pero en las elecciones por Junta Directiva de la Facultad se bloqueó que se legalizara a la nueva representación de UNAJUD que ganó las elecciones, es por esto que solo hay 5 votos en junta directiva: los 2 miembros docentes, los 2 estudiantes uno de relaciones internacionales y uno de MG8 (Movimiento Guevarista 8 de octubre) propietarios y 2 de CPU suplentes, miembros de las organizaciones que apoyaron a la decana en su elección reciente”.
Un caso muy similar sucedió en Humanidades para el mismo periodo, se anularon desde la Asamblea General Universitaria las elecciones que ganó MECH y la Junta Directiva de la Facultad hoy en día sesiona sin representación estudiantil[1](cuando estos órganos deben funcionar con representación tripartita, a saber: sector docente, sector no docente, y sector estudiantil. En algunos casos el sector no docente representa a una especie del sector empresarial interviniendo en la UES, como el caso de la FIA en Ingeniería o de CENIUES en Humanidades).
Es casi una práctica rutinaria de las administraciones de la UES solventar sus diferencias políticas con ataques burocráticos, muchos directores de departamentos y escuelas cometen abusos contra los estudiantes “disidentes” de sus prácticas políticas. Dos compañeros de ACERI fueron denunciados abiertamente por un catedrático de Jurisprudencia por su proselitismo en contra de la decana actual. Estas acciones son típicas de todo poder burocrático, y se vuelve casi un dogma: “si eres disidente, eres opositor y a los opositores no se les debate con argumentos se le destruye a toda costa”, esa política estalinista parece ser el actuar diario de la burocracia a nivel estatal y a nivel de la universidad.
Desalojo de ACERI: la amenaza latente de deshacerse de los disidentes
Las autoridades de la facultad han puesto en marcha políticas para el cierre de espacios ocupados por las organizaciones que no apoyaron su gestión. ACERI denota que Farfán y sus aliados votaron un acuerdo de desalojo de los locales de ACERI y AED con el fin de “recuperar espacios de la facultad para fines académicos”. En un acto de hipocresía los locales de las organizaciones afines a las autoridades de la facultad no son tocados en el acuerdo, ni mucho menos es reconocido el trabajo estudiantil y comunitario de quienes se plantea desalojar.
Ya ha habido dos intentos de desalojo de ACERI, con custodios armados de la UES, en el primero, cerca de 50 estudiantes defendieron los locales, en el segundo, ya había 180 estudiantes en defensa del espacio. UNAJUD, incluso parecer tener una oposición hacia el desalojo y ha brindado cierto a poyo a los estudiantes.
Estos espacios han sido conseguidos bajo la lucha por el pleno derecho de organización estudiantil, y estos ataques significan una violación a ese derecho, pues no hay justificación valida del desalojo (fuese necesario si el local se ocupara para ocio, o incluso negocios ilícitos, que se dan dentro de algunos locales de gremios estudiantiles en la UES).
Por el momento, esto ha sucedido solo en la facultad de Jurisprudencia, pero debemos estar atentos, pues si se trata de un plan de desalojo en toda la UES, muchas organizaciones se verán afectadas.
Por tanto, consideramos necesario hacer un llamado a todas las organizaciones consecuentes de la UES a brindar su apoyo desde sus campos de intervención para la defensa de los locales de ACERI y AED, a establecer alianzas con esta justa lucha y a denunciar cualquier ataque político de las autoridades que gobiernan la UES en contra de elementos consecuentes del estudiantado.
¡No más políticas de desalojo en la UES!
¡Contra las practicas estalinistas de la burocracia!
[1] Ver http://bloquepopularjuvenil.org/la-democracia-de-la-ues-anula-elecciones-en-humanidades/