Partiendo de hechos concretos de las políticas impulsadas bajo el sistema capitalista, podemos argumentar que los jóvenes jornaleros y campesinos pobres sufren unas condiciones de vida en las zonas rurales peores que en las ciudades. Viven en muchos casos sin agua, luz y otros servicios básicos, en viviendas inadecuadas e insalubres; además cada día se ven obligados a trabajar, muchas veces, hasta ponerse bajo el sol por salarios de hambre.
El actual modo de producción capitalista hunde cada día a la población trabajadora del campo y la ciudad a una situación de miseria y de hambre, y aunque se tenga tierra, ¿de qué sirve si se tiene una extensión pequeña sin créditos estatales baratos, sin opción a adquirir maquinaria moderna, sin el auxilio de ingenieros agrónomos y con fertilizantes caros?
El presidente Mauricio Funes manifestó: “El sector agropecuario será la locomotora del sector productivo utilizaré la estrategia de titularización de propiedades y acceso a créditos” (LPG 12/08/09). En los primeros cien días de la gestión de Funes-FMLN, el Ministerio de Agricultura y Ganadería hizo una inversión de de 8.7 millones de dólares, favoreciendo a 160 mil agricultores, cada uno de estos agricultores recibió 25 libras de semilla y un saco de 45 kilos de fertilizante (Informe del Instituto Salvadoreño de Transformación Agraria -ISTA- 04/09/09) así también en los últimos meses se entregaron 3,212 escrituras de propiedad divididos entre seis departamentos La Paz 934 títulos, Son Sonsonate 489, Chalatenango 25, Ahuachapan 276, San Miguel 933, La Libertad 115 y San Vicente 140 según el informe del ISTA 08/09/09 próximamente se entregaran 116,000 escrituras de propiedad.
Consideramos que las medidas que se han impulsado por el gobierno actual en los últimos días han sido muy buenas, pero es justo precisar que esto no es suficiente para que “el agro sea una locomotora del sector productivo” como lo dijo nuestro presidente el pasado agosto, claro esta; algunos hoy tenemos tierras, tenemos semillas y fertilizantes. La pregunta ahora es ¿será suficiente esto para ser una locomotora en la productividad? Pensamos que no. Para cultivar y vender sus productos el campesino necesita mucho más que 25 libras de semilla, el campesino aparte de esto nesecita, que su producción sea de calidad y que con su cultivo e ingresos garantice alimentación saludable y mejores niveles de vida para él y su familia.
Como mínimo esto es algo que no se puede lograr bajo la utilización de semilla mejorada, o semilla “transgenica” ya que esta aparte de atentar con la salud, no garantiza que la próxima cosecha sea producida por la cosecha pasada por no ser semilla “criolla” lo que significa que se tendrá que hacer mas gastos en semilla en la próxima cosecha, mayor implementación de maquinaria en el campo para mejorar las condiciones laborales, capacitaciones de ingenieros agrónomos haciendo uso de los avances de la ciencia para mejorar la productividad y el acceso a créditos accesible para los campesinos, algo que no se puede hacer, por que nuestra banca es completamente privada y a los banqueros no les interesa hacer prestamos a los pequeños productores del campo pues les parecerá que podrían en riesgo su dinero, los únicos que pueden acceder a créditos son los grandes productores.
Si por el contrario la banca fuera estatal se podría orientar los créditos a favorecer a los campesinos pobres y demás trabajadores, con ello se podría ir industrializando de manera paulatina el campo. Se hace necesario nacionalizar la banca para que tengamos créditos accesibles para el sector agropecuario y un desarrollo real del campo. ¡Esto si haría que el campo sea un importante engrane en la locomotora de desarrollo del país!
Según cifras oficiales, existen 600 mil solicitudes de paquetes agrícolas, de las cuales únicamente 160 fueron otorgadas este año (Contrapunto.com.sv 28/0809). Lo que significa que esta medida no fue del todo justa, ya que hubo muchos campesinos que no recibieron paquetes agrícolas, esto generó una cadena de movilizaciones campesinas el pasado 25 de agosto de este año la Confederación Nacional de Campesinos (CNC), la Federación Nacional de Trabajadores del Comercio (Fenatrac) y Centro de Desarrollo Agrario (Cega) realizaron bloqueos de carretera y movilizaciones en varios puntos de nuestro país y de este modo presionar al gobierno para recibir paquetes agrícolas para su cosecha.
Independientemente de que estas movilizaciones hayan sido dirigidas por lideres de derechas o de izquierda, no podemos ocultar el malestar acumulado que los campesinos tienen por los ataques del capitalismo, es lógico que las personas recurren a sus organizaciones tradicionales para luchar, y tratar de cambiar en este caso su situación económica, no importando así la clase de dirección que esté al frente de esta organización. No queremos decir con ello que de igual la dirección que este al frente de la lucha, por su puesto es preferible una dirección de izquierda revolucionaria pero aun cuando fueran dirigidas por elementos de derecha corruptos o reformistas no niega que lo que mueve a los campesinos a luchar son demandas legitimas que debemos apoyar aunque estemos en oposición a su dirección o tengamos criticas hacia ella.
El viceministro del MAG Hugo Flores manifestaba: “Uno de los principales limitantes que se tienen para realizar la entrega de los insumos agrícolas es el desequilibrio entre la oferta y la demanda” (Contrapunto.com.sv 28/08/09) ósea que lo único que importa es la ganancia y no la necesidad de la humanidad, este sistema esta patas arriba pues mientras las familias trabajadoras están carentes de alimentos los campesinos no siempre consiguen vender sus productos. Mas claro que el agua no puede estar, la difícil situación agropecuaria que sufrimos actualmente no es algo que ha sido producto de fuerzas oscurantistas, maldiciones ni tampoco que sean los últimos días de la humanidad, debemos de ser claros y decir que el actual modo de producción no nos favorece en nada, a las clases mas desposeídas.
No podremos ser una locomotora agropecuaria por que no tenemos créditos estatales baratos ni se invierte decididamente en la industrialización del campo. Los bancos están monopolizados por el imperialismo, no hay acceso a la educación capacitada para tener buenos técnicos y agrónomos, no hay buenas condiciones laborales, ni la tierra suficiente para cultivar y producir para nuestra propia soberanía mucho menos para ser exportadores porque la mayor parte de la tierra cultivable esta en manos de Cristiani, Los Pomas, entre otros, es nuestra monstruosa realidad; la cual debemos transformar por eso a la par de la nacionalización de la banca se debe poner la tierra al servicio de los trabajadores, no es justo que un puñado de terratenientes se enriquezcan sumiendo en la pobreza de millones de trabajadores. No nos interesa quitarle la tierra al pequeño campesino sino que las grandes extensiones de tierra a de los terratenientes sean nacionalizadas y a trabajar de manera colectiva por los proletarios del campo bajo control de los mismos, para su beneficio propio y del conjunto del pueblo salvadoreño.
Por eso los marxistas luchamos por:
Un programa de créditos baratos para el campo, gestionados por comités de trabajadores agrícolas.
Comités de control de precios de garantía formados a partes iguales por campesinos, organizaciones sindicales y el ministerio de Agricultura.
Desarrollo integral para el campo contando cada núcleo rural con todos los servicios educativos, comerciales, sanitarios y otros indispensables para evitar la emigración de las zonas rurales
Plan de capacitación agrícola que tenga por objetivo el derecho de todo trabajador agrícola a recibir la preparación adecuada
Maquinaria para desarrollar la producción sin generar desempleo distribuyendo el trabajo por todas las manos existentes
Expropiación de los latifundios y empresas de monopolios de los agroservicios de Cristiani y el resto de terratenientes bajo control obrero y sin indemnización, unida a la obtención de créditos baratos por medio de la expropiación de la banca sin indemnización y bajo control obrero
¡Por la aplicación de un programa socialista ya!
Octubre de 2009