La vigencia del programa de transición para El Salvador
Según las últimas encuestas realizadas en nuestro país (El Salvador), revelan que los problemas que más agobian a la población son en primer lugar la carestía de la vida, en segundo lugar la delincuencia y en tercer lugar el desempleo. Partiendo de esto, podemos revelar sin temor a equivocarnos que los principales problemas de la población trabajadora en nuestro país son el alto costo de la vida y el desempleo. No es casualidad que estos dos problemas coincidan en particular con las consignas a utilizar para combatir al capitalismo salvaje, planteadas en el programa de transición de León Trotsky.
La vigencia del programa de transición para El Salvador
Según las últimas encuestas realizadas en nuestro país (El Salvador), revelan que los problemas que más agobian a la población son en primer lugar la carestía de la vida, en segundo lugar la delincuencia y en tercer lugar el desempleo. Partiendo de esto, podemos revelar sin temor a equivocarnos que los principales problemas de la población trabajadora en nuestro país son el alto costo de la vida y el desempleo. No es casualidad que estos dos problemas coincidan en particular con las consignas a utilizar para combatir al capitalismo salvaje, planteadas en el programa de transición de León Trotsky.
Una de las principales tareas que el FMLN debe desarrollar e impulsar a toda máquina, es crear un puente entre las reivindicaciones actuales, como el aumento salarial, la reforma agraria, y unirlas indisolublemente con un programa para la transformación socialista de la sociedad y es que el FMLN debe impulsar el tema de la organización, en cada fábrica, centro de estudios, lugares de trabajo y en general con toda la población, con especial énfasis en los trabajadores. Tiene que impulsar políticas como la escala móvil de salarios para enfrentar la carestía de la vida ante cada aumento de inflación sobre los productos de la canasta básica, esto es posible, basta con revisar las grandes ganancias del los dueños de las fabricas. Los trabajadores organizados son capaces de revelar los ingresos y gastos de toda la empresa para evidenciar los niveles de ganancias de la burguesía e inspirar a verdaderas transformaciones en este país. El salario mínimo de nuestro país no representa ni la sexta parte de la canasta básica real, es por eso que es necesario llevar a cabo esta medida.
No dudamos en que las masas apoyarán métodos radicales, partiendo de la organización y la tarea de explicar pacientemente a los trabajadores, dando lugar a consignas como la expropiación de industrias claves bajo control obrero, etc. La tarea de la organización de trabajadores en la ciudad debe ser acompañada con el programa de una verdadera reforma agraria, nacionalización y colectivacion de la agricultura, claves para la reactivación del agro, la cual ha sido prácticamente desmontada por los gobiernos del partido ARENA.
Estamos frente a una crisis internacional, que no es otra cosa que la crisis del capitalismo. Hoy más que nunca el programa de transición se vuelve más necesario. Solo el ascenso revolucionario generalizado de los trabajadores salvadoreños, podrá incluso poner a la orden del día la expropiación total de la burguesía. No podemos esperar hasta el 2009 para empezar a luchar por el cambio, la actual crisis esta empujando al país y a la clase trabajadora a un nivel de lumpenización y destrucción de la sociedad, el programa de transición debe ser una prioridad para el FMLN.
Como dijera Trotsky: “Mirad la realidad de frente, no ceder a la línea de menor resistencia, decir la verdad a las masas por amarga que sea, no tener miedo a los obstáculos, ser exactos en las cosas pequeñas como en las grandes, basar el programa propio en la lógica de la lucha de clases”.
3 septiembre 2008