Los grandes medios de comunicación han sepultado toda noticia acerca de las reuniones del Consejo Nacional del Salario Mínimo (CNSM), un tema que le interesa a cientos de miles de familias salvadoreñas parece no tener importancia en la “agenda mediática” de los dueños de los canales y de la prensa.
Los grandes medios de comunicación han sepultado toda noticia acerca de las reuniones del Consejo Nacional del Salario Mínimo (CNSM), un tema que le interesa a cientos de miles de familias salvadoreñas parece no tener importancia en la “agenda mediática” de los dueños de los canales y de la prensa.
Este silencio es a propósito, al fin de cuentas, los dueños de los medios de comunicación son los mismos que están defendiendo la propuesta de aumentar $0.11 diarios al salario mínimo, su silencio les conviene, les permite seguir amasando fortunas a costa de nuestro trabajo.
Sin embargo no podemos reducir todo al papel mediático, en estas semanas hemos sido testigos de otro silencio: el de los “representantes de los trabajadores” en el CNSM, ningún trabajador puede jactarse de haber recibido un informe de ellos y mucho menos una orientación a luchar por un salario justo.
Los trabajadores debemos prepararnos a lo que se avecina en las próximas semanas, todo apunta que los supuestos “representantes de los trabajadores” claudicarán, que cederán a la propuesta de la ANEP, seducidos por alguna compensación económica. Al no haber sido electos democráticamente sino que prácticamente impuestos (los sindicatos a los que dicen representar son cascarones vacíos y en muchos casos patrocinados por los mismos empresarios) no les interesa en lo más mínimo resolver los problemas de los trabajadores.
A medida que se desarrollan las discusiones vemos que nuestros “representantes” no están defendiendo nuestros intereses, sino solo negociando una conclusión favorable para ellos por debajo de la mesa y para la ANEP, es necesario luchar cuanto antes por una representación real de nuestra clase, elegida democráticamente en los sindicatos que realmente existen, pero esto solo será posible con una lucha decidida en las calles.
¡Luchemos por un programa que realmente nos represente!
1) Revisión anual del salario mínimo de manera permanente
De forma inmediata la revisión del salario debe ser declarada anual, a pesar que la ley declara que la revisión no debe exceder los tres años esto deja abierto a que se tenga que esperar este periodo, el costo de la vida sube anualmente y también de forma anual los trabajadores generamos ganancias que van a parar a las “exclusivas” manos de los empresarios. Los trabajadores debemos poner un freno inmediato a esto.
2) Reducción de la tabla salarial a dos únicos salarios
Actualmente existen nueve salarios mínimos distribuidos entre la ciudad y el campo, sin embargo el costo de la vida no es diferenciado, los trabajadores del campo son los compañeros naturales de los trabajadores en la ciudad, la eliminación de esa diferenciación salarial es el primer paso para la unificación de un solo salario para los trabajadores sin distinción, en un primer momento la diferencia no puede ser menor a $25.00 pero debe ser contemplado un plan para la eliminación de esta en un plazo no mayor a tres años.
3) Aplicación de manera inmediata del aumento, ¡Nada de aumento por “etapas”!
Los grandes empresarios se excusan en que un aumento inmediato no podría ser absorbido por las pequeñas empresas, olvidando de forma conveniente que los culpables de la miseria son las grandes empresas que están en posesión de unas pocas manos, a esto respondemos: apertura de los libros contables de las grandes empresas para que los trabajadores puedan darse cuenta con sus propios ojos que esto puede ser factible y a partir de esto imponer un impuesto a las grandes empresas para que el Estado pueda subsidiar a aquellas pequeñas empresas que demuestren previa auditoria que no puedan aplicar el aumento al salario mínimo.
4) Escuchar a los trabajadores: ¡El salario mínimo no debe ser menor a $300!
¡Nada de migajas!, ¡un salario digno para los trabajadores!, ¡desconfianza inmediata de todos aquellos “representantes obreros” que traten de pactar con la patronal!, los trabajadores debemos prepararnos en dado caso se nos quiera vender la idea que un aumento sustancial no es posible.
5) Nacionalización inmediata de las grandes empresas que no quieran pagar un salario digno
Aquellas empresas que quieran boicotear el aumento deben ser inmediatamente puestas en manos del Estado, si las empresas presentan “perdidas” inmediatamente deben ser rigurosamente auditadas por un comité conformado por representantes del Estado y un comité de trabajadores delegado por una asamblea general de trabajadores de la empresa a auditar o por el sindicato de dicha empresa, el gobierno del FMLN debe posicionarse abiertamente al lado de los trabajadores y no debe permitirse que ningún gran empresario se burle nuevamente de nosotros.